HERMANOS Y HERMANAS:

Desde la tierra sagrada de Los Mártires de Acteal nuevamente alzamos la voz por parte de nuestros compañeros y compañeras de la comunidad de Temacapulín, estado de Jalisco, México. Desde hace dos días están sufriendo de calor con todos los hombres y todas las mujeres, niños y niñas en el lugar de El Zapotillo donde se está construyendo la presa.

Ellos están manifestando su inconformidad, no están de acuerdo en la construcción de esta presa porque se afectarán a muchos habitantes de esa región.

Además dicen que no se respetaron el derecho a la consulta contemplada en nuestra Constitución Mexicana y en los diversos tratados internacionales.

Por eso hoy queremos exigir que el titular de la CONAGUA asista al lugar conocido como El Zapotillo para dialogar, respetar la decisión del pueblo ya que en su consulta el 98% se manifestó contra la represa; y respetar la sentencia del juzgado primero del distrito auxiliar que ordena a la CONAGUA el cese inmediato de la construcción de la represa.

Se debe de hacer un diálogo pacífico con los compañeros que se intenta desplazar de sus únicas tierras. Hasta ahora no ha habido respuesta por parte de las autoridades hacia los habitantes, no ha habido un intento de razonar. Sólo agresiones, hostigamientos e intimidaciones.

Los habitantes y ahora manifestantes de este lugar no merecen todo el sufrimiento que están pasando sólo por el hecho de querer vivir.

Queremos dar a conocer a las autoridades que hoy se encuentran presentes en el Zapotillo un grupo de personas observadoras por la Paz que son miembros de Las Abejas de Acteal, Chiapas.

Queremos que nuestros compañeros regresen con bien y tranquilidad a sus lugares de origen, si en caso llegara a suceder un daño a su integridad física, así como a todos los presentes responsabilizamos directamente a los tres niveles de gobierno, así como a CONAGUA y CEA.

Ya no queremos más derramamiento de sangre o una masacre como la que nosotros sufrimos hace ya 13 años y tres meses.

En pocas palabras no queremos agresiones, hostigamientos, ni  amenazas, ¡Tan Sólo Queremos Vivir!