Ayer por la mañana el colectivo Regeneración Radio ceso sus labores de comunicación por una situación insostenible: los ataques porriles del grupo 3 de Marzo.
Decidimos desde tempranas horas resguardarnos en el edificio de la dirección, para proteger nuestra integridad.
Cerca de las 3 de la tarde en la explanada central uno de nuestros compañeros fue golpeado por un grupo de aproximadamente ocho porros con olor a tiner.
A su vez se estaba realizando una reunión de los colectivos y los estudiantes organizados para coordinar cuales serían las medidas de seguridad; el grupo porril comenzó a
identificar a nuestros compañeros de la radio y de los demás espacios, así como a los estudiantes; comenzaron a golpear y agredir.
Inmediatamente algunos de nosotros nos resguardamos en el edificio de la dirección, cerrando puertas y ventanas.
Nos percatamos que un compañero de Regeneración Radio al igual que otro compañero del colectivo Revuelta habían sido lesionados con armas punzo cortantes. Para nosotros era
imposible que recibieran atención médica por las condiciones de inseguridad que se vivían dentro del plantel.
El grupo porril comenzó a deambular por el colegio intimidando, amedrentando y golpeando a estudiantes y a cualquier persona que tuviera relación con alguno de los espacios;
un compañero de la programación de Regeneración Radio también fue golpeado.
Fueron cinco horas y media que el terror en manos del grupo porril reinó en el Colegio de Ciencias y Humanidades de la UNAM, plantel Vallejo. La violencia alcanzó a
estudiantes y a activistas por igual.
Durante este tiempo no dejaban de agredir y amenazar de muerte a quienes nos encontrábamos resguardados. Los ataques duraron aproximadamente tres horas.
La cabina de Regeneración Radio fue destruida y parte del equipo fue robado. Nuestro cubículo donde guardábamos las herramientas para el mantenimiento del equipo también fue
robado. Al igual la mercancía la cual vendíamos para gestionar nuestro espacio. Los demás espacios de organización de igual manera fueron destruidos.
Mientras nos resguardábamos en la dirección del plantel, el 3 de marzo hacía gala de la impunidad que lo cubre, en medio de autoridades y policía de Distrito Federal
actuaban sin que nadie les dijera nada.
Posteriormente el grupo porril fue desalojado de la escuela. La respuesta del movimiento social, de las organizaciones, colectivos y grupos organizados permitió que quienes
nos encontrábamos en la dirección pudiéramos salir del edificio directivo.
En estos momentos nuestro espacio no puede seguir con las actividades de radio, las condiciones físicas de la cabina no lo permiten, así como el clima de violencia generada
por este grupo de choque.
Nuestras exigencias hacia las tres instancias de la universidad son que se garantice la seguridad hacia la comunidad del CCH-Vallejo, permitiendo que la vida académica
continúe en la cotidianidad. También exigimos que esta ola de violencia hacia los grupos y espacios organizados sea detenida. Y que se responsabilice a los agresores.
Hasta el momento lo único que se han dignado hacer las autoridades es minimizar los hechos, y criminalizar la organización que se generó a partir de los ataques porriles.
El día de ayer por la noche uno de nuestros compañeros fue ingresado a una cirugía para impedir que su pulmón derecho se colapsara. Su estado de salud es estable, sin
embargo pedimos apoyo para los gastos médicos generados.
Compañeros es lamentable esta situación para nosotros. Dicen por ahí que <<Donde ellos destruyen…nosotros reconstruimos>>; les pedimos su apoyo y solidaridad para luchar y
resistir por la defensa de nuestros espacios, por la defensa de la comunicación de abajo, de esta comunicación contra el poder.
DESDE EL NORTE DE LA CIUDAD DE MÉXICO
REGENERACIÓN RADIO
COMUNICACIÓN CONTRA EL PODER